A pesar de que la conservación de la biodiversidad, los ecosistemas y los recursos genéticos es uno de los principales objetivos de toda reserva de biosfera, en muchos casos esto difícilmente se cumple. En Centroamérica, por ejemplo, existen acciones contrarias a los compromisos adquiridos con la designación internacional de reserva de biosfera, por mencionar algunos ejemplos:
• En Guatemala, la Reserva de Biosfera Maya ha sido deforestada en el 45% de su territorio y la tala ilícita sigue aumentando en la región (información reportada en la página Web de la Comisión Nacional de Áreas Protegidas). Incendios intencionales, invasiones, avance de la frontera agrícola, tráfico de flora y fauna, entre otras, son las actividades ilegales que amenazan esta reserva de biosfera.
• En Nicaragua, se cuestiona la sostenibilidad de los procesos de conservación en la Reserva de Biosfera Bosawas. Recientemente, entre enero y mayo del 2010, fueron publicados diferentes artículos periodísticos que expresan preocupación por la acelerada deforestación en esta reserva de biosfera. De acuerdo a estudios de la Agencia de Cooperación Alemana, en la Reserva de Biosfera Bosawas, la tasa de deforestación fue de 41,000 hectáreas por año para el periodo de 1999 a 2005. En mayo de este año, la Comisión Nacional de UNESCO hizo un llamado urgente a nivel nacional para actuar y parar la destrucción de Bosawas.
• En Costa Rica continua en discusión el establecimiento del proyecto de minería de oro a cielo abierto Crucitas. De acuerdo al Decreto N°34801-MINAET firmado en octubre del 2008 durante el gobierno de Oscar Arias, se ratifica la concesión de la explotación minera y se autoriza a la empresa canadiense Industrias Infinito S.A. la tala de árboles (inclusive la de especies vedadas) en 191 hectáreas de bosque, 66 hectáreas de actual uso agropecuario, y 4 ha de plantaciones forestales. Esto ubicado en la zona de transición de la Reserva de Biosfera Agua y Paz, y a escasos kilómetros de la frontera con Nicaragua y de uno de los ríos más importantes de Centroamérica, el río San Juan.
¿Se están cumpliendo realmente los objetivos de reserva de biosfera? ¿Se están valorando los costos de la pérdida de los servicios que proporcionan estos ecosistemas? ¿Con estas acciones se garantiza una mejor calidad de vida para los pobladores locales?
Tania Moreno. Coordinadora ejecutiva Cátedra UNESCO en RB y SPM